LA DOBLE CARA DE LA PROTEÍNA ELF5

El equipo de investigación liderado por David Gallego-Ortega ha descubierto cómo la proteína Elf5, imprescindible para la lactancia materna, se «descontrola» en el cáncer de mama, lo cual favorece la  de células cancerosas en el torrente sanguíneo y su diseminación por el organismo.

En la gestación y en condiciones normales, la proteína Elf5 entra en funcionamiento preparando a las células de mama para la producción de leche durante la lactancia. Sin embargo, tal y como se publica en la revista Plos Biology, esta proteína está implicada en dos de los aspectos más agresivos del cáncer de mama: La resistencia a fármacos y la metástasis.

En este sentido, el reciente estudio señala que la cara negativa de Elf5 es que las células que la expresan son capaces de engañar al sistema inmune para que se produzca inflamación en el tumor y como consecuencia a esta inflamación, se incremente la aparición de metástasis.